Diez semanas han pasado desde que se confirmó el primer caso de contagio de coronavirus en Chile. El panorama estuvo muy claro desde un comienzo, si no se actuaba apropiadamente existiría un colapso de la red de salud. Pública primero, privada después.

Actualmente la situación es crítica y no hace nada más que empeorar. Los cálculos del gobierno ya no dan para disfrazar la crisis completa del Sistema Sanitario, la Salud es un Derecho Humano que en Chile no está asegurado. Por otro lado, las autoridades que deben liderar estos procesos históricos, son noticia mundial por su pésima gestión de la crisis, siendo los principales responsables de la situación actual y no la gente que debe recorrer la ciudad para poder alimentarse y subsistir.

Los centros de salud en todos sus niveles están colapsados en su capacidad, peor es el caso de las comunas desplazadas de los centros económicos y las comunas rurales. Que decir de los migrantes, de las  mujeres. Incluso la situación de los trabajadores de la salud se encuentra condicionada a directores de hospitales que prefieren guardar información antes de escuchar la voz de los mismos. Tal como sucede en el Hospital San José, donde sus trabajadores son los más expuestos al contagio del virus.

El virus, aparte de aprovechar condiciones ambientales óptimas, se aprovecha de las brutales condiciones de desigualdad en que vive la mayoría de la población, agudizando todas y cada una de las dimensiones de la pobreza.

Esta crisis no puede seguir siendo manejada por las mismas personas que nos han llevado por un derrotero tan lamentable y predecible. En lenguaje empresarial podríamos decir que la Salud entró en quiebra (breakout) y sus gerentes son absolutamente incompetentes en cuanto a mejora de los números se trata.

Por lo anterior, es que pedimos la destitución del Ministro de Salud de su cargo y se de paso a una participación directa y efectiva de los colegios profesionales y las organizaciones territoriales de Salud. Con esto, entendemos que no se solucionará de un día para otro la crisis sanitaria -Para salir de esta crisis no solamente es necesario un cambio de ministro, es necesario cambiar el Sistema de Salud en su totalidad-.

A continuación algunos otros elementos que respaldan esta conclusión:

  • Números y estadísticas mal manejados intencionadamente, tanto en su cuestionada metodología como por la imposibilidad de acceder transparentemente a los datos. Peor que no saber nada, es saber mal;
  • Desabastecimiento transversal de insumos y equipamiento en centros de salud. No solo faltan ventiladores, faltan resonadores magnéticos, pabellones, aerocámaras, medicamentos complejos, y más;
  • Precarización del trabajo para funcionarios del sistema de salud, sin poder asegurar garantías laborales mínimas. El hecho de que se piense en la necesidad de contratar estudiantes no titulados demuestra que tampoco existe una planificación del recambio y al rotación predecible del personal de salud;
  • La situación de los hospitales San José, San Juan de Dios, El Pino, El Salvador, Félix Bulnes, Carlos Van Buren y varios otros;
  • “Quiebre del stock” nacional para muestras de PCR para seguimiento adecuado de los contagios;
  • Para finalizar, antecedentes de manipulación de datos y estadísticas de salud a nivel nacional armando clínicas de especialidad falsas para mentir sobre el fin de las listas de espera.

Creemos que las acciones a seguir debieran considerar, como principal tarea, la de recuperar el Derecho a la Salud de todas las personas y comprender que ningún Sistema de Salud puede estar completo si no existe un Sistema Educacional que acompañen y potencien su acción.

 A continuación algunas acciones que nos parecen necesarias y urgentes:

  1. Aumentar drásticamente el presupuesto de salud para reforzar turnos en hospitales, adquirir maquinaria e insumos y reforzar la red asistencial en su totalidad.
  2. La elaboración de un Plan Nacional para salir adelante en esta crisis para tomar las mejores decisiones con participación directa del Pueblo y de la sociedad civil. Siendo el ministerio el responsable de cumplir este plan.
  3. Aumentar el financiamiento y la articulación de las Universidades y centros de estudio en Salud para la elaboración de Investigación, Desarrollo e Innovación con aplicación en el corto plazo.
  4. Reforzamiento y refundación de planes de respuesta a la emergencia, frente a situaciones psicosociales tales como, violencia intrafamiliar, violencia de género y muertes de familiares.
  5. Consideración de planes de Educación Pública a través de los canales de televisión abierta como propuso el Colegio de Profesores en conjunto con Premios Nacionales, Académicas, Actores, Actrices y Periodistas.

Con la firme esperanza de que de alguna manera y en algún momento lograremos salir de esta crisis y retomaremos las calles para hacer nuestra la realidad de una nueva Constitución a través de una Asamblea Constituyente soberana y multicultural. Creemos que esta crisis debe enfrentarse en conjunto y unidad, siendo las redes de apoyo comunitarias y territoriales la clave para el bienestar del Pueblo.

 

 

Coordinadora de Salud Partido Humanista

Equipo de Coordinación Nacional